martes, 6 de diciembre de 2011

Los políticos

Siempre se dice "que antes se coge a un mentiroso que a un cojo" o que "las mentiras tienen las patas
cortas".... Pero esos refranes no siempre se cumplen.

 Hay gente que nace con una habilidad extraordinaria para mentir. Algunos, incluso se creen sus propias mentiras y no son conscientes de ellas.
Los que quisieran haber sido... y realmente creen que lo son. Los que querrían haber tenido... y creen que lo tienen.
O esos otros que agrandan un abrigo de astracán y lo convierten en varios, de diferentes hechuras y colores.
¿Y los que tienen una pareja tan inteligente que ve la hierba crecer? O unos hijos ilustradísimos para los que opositar a notarías sería una minucia?.
De todo hay en la viña del Señor. Y para tontos, los que cogemos antes al cojo que a ellos.

Con los políticos no hay tonto que valga, todos nos damos cuenta de cuanto mienten, no se si se lo creerán o no, pero mentir, mienten. Ofrecen duros a peseta, como los antiguos charlatanes, que se ponían en el centro de las plazas a vender elixires mágicos que curaban casi todo. Lo mismo daba que el niño no tuviera apetito,que el marido fuera impotente o que el acné nos hubiera hecho irreconocibles. Todo eso tenía remedio. Menos mal que eran baratos, porque hay que ver a cuánta gente engañaban.
Estos lo hacían para ganarse el pan de cada día. Los otros, los políticos, el jamón de jabugo, el caviar iraní y el salmón noruego de cada día, pero no sólo para ellos, sino para toda su familia. Encima de mentirosos, solidarios de pacotilla: No queda un primo ni un cuñado sin meter la manita en el cajón público.

Me río yo de que pidan a la gente que "trabajen con tesón, como nunca en su vida, para levantar el país". ¿Dónde? ¿Trabajar virtualmente como aquella modista con alzheimer que cosía sin agua, sin hilo y sin tela?. El tesón ya lo demuestran pasando frío en las colas de las oficinas del INEM, un mes tras otro, y ni para pan.



2 comentarios:

  1. ¡Cuánta verdad! Y no vayas a creer que eso sólo sucede en España, por aquí, en Argentina, se cuecen las mismas habas. Pareciera que el "político", es una especie en proliferación y mutación continua, lástima que se transforman en cada vez más mentirosos y caraduras.

    Muy bueno tu post!!

    Un beso grande :)

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  2. Gracias por visitarme Liliana. Que gusto me dá, que estando tan lejos, estemos tan cerca. Pues es verdad lo que dices, de hecho aquí tenemos un refrán que dice así: "En todas las casas cuecen habas, y en la mía calderadas...." (O sea, en mi casa, muchísimas habas). Bonitísimo país el tuyo. Besos.

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