La Plaza Mayor de Madrid |
De Madrid al Cielo.
La primavera de Madrid es hermosa. Procuro perderme algunos días cada año por estas fechas en la vorágine madrileña. Y camino sobre mis huellas del año anterior... Los mismos lugares, las mismas tapas, idénticos recorridos que me hacen sentir de nuevo la juventud añorada.
El Parque del Retiro con su estanque dorado, las casetas del libro antiguo rodeadas de flores en el Paseo del Prado, el Rastro con olor a rastro, el Palacio Real y sus recuerdos, las porras mañaneras, el metro pegajoso, la Plaza Mayor y su alegría, Cibeles orgullosa, La Puerta de Alcalá espléndida y neutral testigo de tantos acontecimientos...
No se puede pedir más a una ciudad. Pero sí menos.
Menos mendigos, menos muñones al descubierto, menos sin techo durmiendo entre cartones en las callejas aledañas a la Plaza Mayor, menos abandonados en el metro, menos ancianos vulnerables y sucios...
¿De veras no se puede hacer nada para borrar esta neblina de tristeza que empaña un paseo por Madrid?.
Todas las monedas que puedas preparar en los bolsillos, son pocas. Cuando has recorrido unos metros, ya las has puesto todas en sus cuenquitos mugrientos o en sus manos agrietadas.
¿Para qué tantos Organismos encargados de Asuntos Sociales?
La miseria me indigna, me duele, me empobrece como ser humano. Nadie tiene la culpa de nada, pero todos los que formamos la sociedad, la tenemos un poco o un mucho.
Ya lo creo que se cumplirá el dicho, porque si no lo remedian pronto, irán al Cielo, al Infierno o a donde sea. Les matarán el hambre y la desolación.
Lo que dices es verdad, pasa no solo en Madrid sino en otras grandes ciudades, pero cada día la miseria y el abandono de las personas parece más y más grande.
ResponderEliminarPero a pesar de todo yo soy un madrileño enamorado de mi ciudad (aunque ahora viva en la costa)y sobre todo de la forma de ser tan abierta de las personas que viven en Madrid. Viva San Isidro.
Así es Campanilla. Hace poco pasé por la Plaza Mayor y una señora comentaba a otra que era una vergüenza ver a los indigentes tirados, que vaya imagen. ¡Lo miraba desde la estética! Es increíble que no pensara en ellos como personas sin hogar, que sufren y padecen no solo el hambre y la soledad, sino el menosprecio de la gente. ¿Qué pasa, si se hubiese puesto ella en una esquina a pedir? acaso sería más decorativa por ir bien vestida. Pues que no hable muy alto, que tal y como está la situación cualquier día puede ser ella compañera de cartón y manta.
ResponderEliminarBesitos y buena noche.
Lamentablemente, es un asunto común en todas las ciudades grandes o chicas. Es la consecuencia de muchas causas y todos debemos ayudar en lo poco o lo mucho que esté en nuestras manos.
ResponderEliminarViendo esta situación, común a todas las ciudades,
ResponderEliminarla vida deja de ser "casi bella..."
Y la que nos espera....
muchos besos.
Cuanta razón tienes, duele el corazón de ver tantos humanos tirados y sin que nadie casi los mire. En esta época aún peor porque la gente los rechaza por recordarles comoestamos...Tanto boato unos y otros ni pueden comer...¡patético!
ResponderEliminarBesos
Campanilla,hemos ido de paseo contigo y hemos visto Madrid,con sus luces y sus sombras...Ahora podríamos decir de Madrid al mundo,porque lo bueno y lo malo pulula mezclándose y sorprendiéndonos positiva y negativamente...No podemos dejar de sentirnos ciertamente culpables de los pobres y olvidados,es cierto,pero,poco podemos hacer,si los mandatarios no toman cartas en el asunto,amiga...Ahora en época de crisis veremos aún más casos,que nos encogerán el corazón.
ResponderEliminarMi gratitud por tu equilibrado y sensato post,Campanilla.
Mi abrazo grande por tu cercanía y buen hacer.
Feliz jueves y todos los días.
M.Jesús
Tienes toda la razón Campanilla, y es una pena. Tiene que ser muy duro. Conozco muchos casos por la Hermandad del Refugio de Zaragoza, donde algunas veces voy a hacer lo que puedo. Cada vez hay más, y es muy fácil caer..., primero el paro, luego el alcohol y por último mala relación con la familia. De tener una vida sin problemas, hasta llegar a una situación de estar en la calle, se pasa por esos tres aspectos que he nombrado antes en cuestión de unos 4 a 6 meses, no más. Me ha gustado que hagas mención de ello amiga. Un fuerte abrazo desde el blog de la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
ResponderEliminarhttp://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/
Es cierto como dice un comentario, que esto también se ve en otras grandes ciudades en mas o menos proporción, pero Madrid es el lugar de las oportunidades incluso paras las mafias que lamentablemente también existe en la mendicidad. Hace unos días fue noticia la detención de una banda de rumanos que traía minusválidos de su país para obligarles a ejercer la mendicidad.
ResponderEliminarAparte de eso, es verdad que cada vez hay más pobres, y los ricos ricos cada vez más ricos, esa es la tendencia, pues la avaricia es ciega y los avariciosos no verán (y no quieren ver) lo que tu has visto y que yo también observo, cada vez que tengo oportunidad deposito mi donativo en el correspondiente cuenco aunque pueda ser de la mafia, por si acaso no lo es, no me quiero ir con la duda. Eso no es solución pero…
De Madrid a la solidaridad.
Un abrazo
Es verdad de Madrid al cielo..yo que lo conozco es muy romantico y hermoso.
ResponderEliminarte deseo un feliz fin de semana
con besos
Marina
Ojalá que ese sueño se cristalice y sea disminuyan todos esos problemas que describes, pero por la vía de la justicia y la hermandad, respetando la dignidad humana.
ResponderEliminarBesos amiga reluciente y voladora, con cariño.
Ojala se cumplan tus deseos que también son los míos. Y es verdad que Madrid es una ciudad hemosa.....
ResponderEliminarOjala se cumplan tus deseos que también son los míos. Y es verdad que Madrid es una ciudad hemosa.....
ResponderEliminarSe ha hecho de esta ciudad durmiente una sonámbula total, tampoco podemos asociarla a una sola postal inamovible, hay mil cosas que atraen y otras tantas que nos afligen. Y hoy mismo he visto a dos personas llevar alimentos a un mendigo de la calle, éste abrió los paquetes muy ansioso de ver el contenido. No faltan gestos bondadosos que dicen bien del ser humano.
ResponderEliminarUn abrazo amiga campanilla, que tengas buen fin de semana.
Hola Campanilla!
ResponderEliminarEsa historia que cuentas ya la vivimos en Argentina a comienzos del siglo XXI, y parece mentira que los políticos del Norte no hayan tomado nota de lo sucedido y sigan aplicando las recetas retrógradas del Banco Mundial y el FMI, las mismas que pusieron a mi patria al borde de una guerra civil...
Espero que los pueblos sigan resistiendo, pues son los únicos que pueden cambiar el rumbo político y económico en democracia...
Beso grande!!
RoB
Madrid la bella, Madrid la de todo es posible. Lo bueno y lo malo.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Me gusta :) Te sigo
ResponderEliminarBesos desde www.serenabea.blogspot.com.es y www.lafuerzadeunavoz.blogspot.com.es
hay muchas cosas que deberian cambiar.
ResponderEliminartoda la razon del mundo
bueno la verdad es que nuestra ciudad es un hervidero de cosas que habría que cambiar y esta que cuantas es una de ellas. Pero por muchas monedas que estes dispuesta dar, son los organismo los que deben moverse para intentar paliar el problema.
ResponderEliminarun besote
es la ciudad que mas me encanta en españa
ResponderEliminares maravillosa glamorosa donde los ideales se entremesclan
es preferible vivir el presente con alegria que tocar en la sangria de los problemas
paz y bien
Mi querida y dulce amiga, yo no se lo que a ti te puedo llegar a aportar, pero si sé lo que a mi tú me aportas...
Una gran alegría y satisfacción cuando encuentro que has dejado la esencia de tu persona en un rincón del alma.
Ahora deteniéndome en la entrada te diré, que todo lo el texto es una autentica realidad, en este mes esta precioso pero hay esos otros detalles que le restan una pequeña de la tanta belleza que tiene.
Yo me muevo siempre en ese centro que has descrito y las monedas siempre tienen que estar a mano durante todo el día porque con sonrisas no son suficientes para paliar la desolación que les acompaña. Mientras en las terrazas de bote en bote se quedan las consumiciones sin terminar, algo que me apena enormemente, unos mucho y otros tan poco es nada.
Un abrazo
envuelto por el afecto
desde Madrid.
María del Carmen
Como en todo, cada uno tiene sus gustos… Madrid me gusta más en otoño o Navidad, esa marea algo kish de gente con peluca y gorros raros, el bullicio, las luces…
ResponderEliminarSerá que la primavera en Sevilla me tiene acomodada a su azahar mezclado con incienso, las torrijas y los volantes en los escaparates…
En cuanto a la otra parte de tu post, poco puedo añadir. Soy Integradora Social y estudio Trabajo Social; y sinceramente, para llevar a cabo mi profesión nunca escogería Madrid. No porque me agobie la miseria, no por desesperación, es que con un gobierno y una alcaldía en la que tan poca atención y recursos se prestan a los Servicios Sociales me mataría la impotencia…
Kisses
Tus preguntas duelen, las respuestas urgen.
ResponderEliminarLinda, claro que aparecen tus comentarios. Y tu los puedes ver, pues no los doy de alta yo, sino automático en cuanto los pones.
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